Durante muchos años, la industria alimentaria ha perjudicado la salud de la humanidad en su afán por aumentar sus ganancias económicas.
la naturaleza de las especies es lógica; las vacas comen pasto y los leones comen carne, ellos son felices y saludables basados en su dieta natural, ¿que pasa si una vaca come mariscos o si un león come espinacas? enfermarían y morirían, lo mismo sucede con los humanos, tenemos una naturaleza en nuestra alimentación y cuando no la seguimos suceden cosas como la obesidad, la gastritis. La diabetes el cáncer entre muchas otras.
Durante años el hombre ha manipulado los alimentos de muchas formas, no solo utilizando químicos para industrializarlos, sino también utilizando ingeniería genética para mutar alimentos desde su cosecha.
Un estudio de profesores de la universidad de Harvard demostró que el trigo con el que preparan el pan industrializado, destruye la flora intestinal del estomago. El trigo en la mayoría del mundo ha sido mutado genéticamente por la intervención del hombre para tener cosechas más grandes y productivas. Hoy en día el gluten es prácticamente un veneno.
Nova Jocovic campeón mundial de tenis descubrió junto con su medico y su nutricionista que podía doblar su rendimiento físico con una dieta sin gluten ni azucares.
Grandes compañías presentan supuestas bebidas para deportistas que son saludables cuando en realidad lo mejor para beber es el agua. Los colorantes de todas esas bebidas como el Gatorade son derivados del petróleo y no es saludable digerir estas sustancias.
En realidad, el azúcar es una forma de adicción, interfiere con el apetito del cuerpo creando un insaciable deseo de seguir comiendo, un efecto que la industria alimentaria utiliza para aumentar el consumo de sus productos. “Quien consume azúcar quiere más y más, incluso cuando ya no tiene hambre”
Las famosas pastas de preparación instantánea en realidad son plástico que tu estomago no puede eliminar ni digerir durante meses.
Estas grandes marcas contratan científicos y expertos que argumentan que sus productos son aptos para el consumo humano. Lo argumentan y lo defienden de la misma forma en que lo argumentaban hace algunos años cuando se creía que el cigarrillo era saludable.
Si miramos en la antigüedad los humanos éramos cazadores o recolectores, comíamos plantas, frutas, insectos, peces o mamíferos. Pero estos animales que cazábamos eran animales salvajes bajos en grasas. Los animales que comemos actualmente viven en granjas industriales de alimentación donde no se les permite moverse y solo se busca que engorden para ser sacrificados, son animales demasiado altos en grasa que además viven en condiciones miserables y antinaturales. Les inyectan cualquier cantidad de hormonas, antibióticos y químicos. La diferencia entre comerse una hamburguesa de carne en Mac Donald y comer un trozo de carne de una vaca salvaje son muchas.
La industria porcina es una de las más destructiva del mundo. Las granjas industriales de Estados Unidos tienen gigantescas lagunas para botar los excrementos de estos animales. Excrementos que no sirven como abono debido a su confinamiento. Contaminan toneladas de agua al día y literalmente destruyen el ecosistema y los ríos.
Toda esta cantidad de cerdos requieren toneladas de alimento y Para poder cultivar todo ese alimento (Soja) es necesario talar millones de hectáreas y tumbar bosques enteros. Solo en Brasil el 20% del pulmón del mundo (El Amazonas) ha sido demolido para sembrar soja, sin arboles no hay oxigeno, Sin ríos no hay agua potable, el negocio de la industria alimentaria no solo envenena los humanos, también destruye la tierra porque aumenta el efecto invernadero y de esa forma la tierra se calienta más, derritiendo los polos y causando desastres naturales.
No soy vegetariano, pero yo pienso que lo mejor es comer la mayor cantidad de plantas y frutas posibles, en el consumo de la carne creo que comer peses es lo mejor, en su mayoría son animales que viven en ríos y mares de una forma natural.
Es muy diferente alimentarse a comer y piénsalo muy bien la próxima vez que lleves algo a tu boca.