Cuando llega un maldito ataque de ansiedad, sé que todo por lo que he luchado se va al caño, no puedo trabajar, no tengo energía para afrontar la vida, no estoy emocionalmente estable para tener relaciones.
Pero se exactamente que es lo que tengo que hacer y ese proceso generalmente tarda mas de un año, en realidad soy un guerrero.