fbpx

A los 19 años una tragedia en mi familia cambia mi vida

Después de seis largos años en la escuela militar. obtener un titulo como bachiller y una libreta militar como reservista de primera línea y fusilero, debía decidir qué hacer con mi vida, casi todos mis compañeros de la escuela continuaban con la carrera militar, teníamos ciertas ventajas al ingresar a las fuerzas armadas y estábamos mucho más preparados que un estudiante normal.

Mi papa quería que yo ingresara a la Armada, yo me presente pero no pase los exámenes académicos, así que ingrese a una de las mejores universidades del país a estudiar marketing y negocios internacionales en la Universidad Sergio Arboleda.

Pero cuando estaba en primer semestre sucedió una tragedia en mi familia, un problema muy grave y mi papá desapareció, No puedo hablar en público de lo que sucedió, pero me volví a reencontrar con mi papa 11 años más tarde.

Mi mamá era una mujer que no tenía dinero ni había trabajado nunca en su vida, mi padre era la persona que nos proveía todo a mí y a mis hermanos.

Tuve que devolverme a vivir con mi mama y mi hermano menor. De un día para el otro, estábamos sin un peso y empezamos a vender los cuadros y las obras de arte que teníamos en la casa para poder hacer mercado. Vivíamos en un barrio de ricos pero no teníamos ni para comer, y con el pasar de un par de años perdimos el apartamento, el carro y todo lo que mi papá nos había dejado.

Empezamos a mudarnos de un sitio a otro cada vez peor, Mi hermanito menor era muy pequeño. Tenia 9 años y cuando yo le di la noticia de mi padre, se agarro la cabeza desesperadamente, dio vueltas como loco y empezó a llorar, yo le hable de una manera muy brusca y le dije “tiene que ser fuerte” me arrepiento tanto de eso, tan solo era un niño.

Sin embargo: mi abuelo materno, nos ayudaba para poder sobrevivir, mi abuelo era un señor de un malgenio terrible, gritaba por todo, un campesino y ganadero de toda la vida, que ha base de mucho trabajo había logrado tener una gran finca ganadera en la costa y una bonita casa en un buen sector de Bogotá.

Todos los fines de semana visitábamos a mi abuelo, realmente lo amamos con el corazón a pesar de su mal genio y ademas era la persona que nos ayudaba con los gastos de la casa y de mi universidad.

Habían pasado unos tres meses desde la desaparición de mi papa, era un sábado, estábamos todos viendo televisión en el cuarto de mi abuelo y de un momento a otro el se sentó y empezó a levantar los brazos indicando que el brazo izquierdo se le había dormido. empezó a gritar por un fuerte dolor en el pecho. Yo le tocaba el pecho con desesperación sin saber qué hacer, solamente veía su cara de angustia mirándome fijamente a los ojos.

Rápidamente montamos a mi abuelo en el carro y nos fuimos al hospital, mi mama de los nervios no podía manejar muy bien. mientras llegábamos al hospital, yo gritaba por la ventana del carro con todas mis fuerzas “Emergencia, por favor den paso” mi mama pitaba durante todo el trayecto.

Al llegar al hospital mi mama monto el carro sobre el anden del hospital  y yo rápidamente cargué a mi abuelo y entre con el en brazos gritando”ayuda por favor, se esta infartando “.

Rápidamente las enfermeras lo atendieron y lo montaron en una camilla, nos agarramos las manos, nos miramos a los ojos y nos despedimos.  Fue la última vez que vi a mi abuelo con vida, en horas de la madrugada recibimos la trágica noticia, a mi abuelo se le había reventado al vena ahorta por una de sus rabias y estaba muerto.

A los pocos dias de su funeral, mis tías y mi madre empezaron a pelear por la herencia de mi abuelo, hubieron mil problemas y conflictos, mi madre y yo nunca pudimos obtener nada de la fortuna de mi abuelo, y desde ese momento decidí apartarme para siempre de toda mi familia materna. Solo Dios sabe el sufrimiento y el infierno que viví, sin dinero, sin familia, sin experiencia, solo Dios sabe cuanto me dolió , cuanto los extrañaba y cuanto los necesitaba. Después de muchos años nos volveríamos a reencontrar, nos une la sangre pero el vinculo familiar se perdió con el pasar del tiempo.

La familia, es tal vez para mí lo más importante, sin embargo; cuando una familia es conflictiva, vive en medio de gritos y peleas, cuando una familia es tóxica, cuando no hay cariño ni respeto, cuando no hay apoyo en las metas y objetivos de sus miembros, cuando critican lo que quieres hacer con tu vida y no te dejan brillar con luz propia, debes alejarte y buscar tu propio camino. Siempre tienes la oportunidad de escoger y crear tu propia familia. A Muchas personas no las deja evolucionar su propia familia.