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Ingrese a la escuela militar a los 12 años

Ingrese a la escuela militar en sexto de bachillerato a los 12 años, el colegio era una base militar y los horarios eran muy diferentes al resto de colegios, durante la semana teníamos clases académicas y salíamos a las 7 de la noche. los viernes, sábados y domingos íbamos al campamento a recibir instrucción militar. fueron seis largos años hasta poder graduarme y recibir un titulo como reservista de primera linea y fusílero.

libreta militar

 

El primer día recuerdo que un sargento nos formo y nos dijo, “reclutas, bienvenidos a la escuela militar Antonio Ricaurte” aca van aprender la disciplina, el amor a la patria y el honor, primero van a pasar al medico a que les hagan un examen de baricocela, y luego pasan por sus uniformes.

Nos metieron a todos en un cuarto y llego un medico, el cual nos hacia bajar los pantalones hasta la rodilla y nos palpaba los testículos para verificar que no tuviésemos baricocela, luego nos entregaron un uniforme militar y nos hicieron formar nuevamente, nos enseñaron la distancia que debíamos tener entre cada uno de nosotros y la posición de firme y adiscreción.

A mi lado estaba un chico que luego se convertiría en mi mejor amigo de ese reformatorio, Eduardo Aguas. era un chico rubio con el pelo hasta los hombros y con un gran sentido del humor, todo el tiempo estaba bromeando. Después del examen medico, la postura del uniforme y la formación; pasamos a la peluquería, nos rapaban a todos.

Eduardo se opuso a cortarse el pelo y desafío al sargento gritándole, (si quiere écheme de este puto manicomio, qué no me importa) en ese momento el sargento se abalanzo hacia el y con varias patadas lo derribo al piso, mientras le gritaba (acá no se hecha a nadie recluta de mierda) mientras lo entraba a empujones a la peluquería, Eduardo lloraba de la rabia o el dolor mientras le cortaban su larga cabellera.

El mundo en esa época era totalmente diferente, el ejército era una institución basada en la letra con sangre. El bullying hacia los más vulnerables era algo terrible, varios de los chicos que ingresaban era por qué tenían conductas femeninas y supuestamente allá los convertían en hombres.

Mis compañeros eran jóvenes realmente maldadosos y agresivos, afortunadamente yo estaba entre los chicos altos, entonces solo algunos pocos se atrevían a molestarme. conforme pasó el tiempo me fui acostumbrando a la violencia del colegio, ese primer año era un chico muy solitario y sin amigos, en los descansos siempre estaba aislado y comía solo para que los otros chicos no me quitaran la comida, mientras Eduardo se la pasaba corriendo y detrás algún comandante persiguiéndole para pegarle, se hizo muy popular en corto tiempo, Pues tenía la costumbre de bajarse los pantalones, mostrar el trasero y salir corriendo, eso era muy gracioso  y con el pasar de los años se convirtió en uno de los mejores deportistas del colegio.

Eduardo fue mi mejor amigo durante todos esos ańos, nos protegíamos mutuamente, crecimos y nos volvimos fuertes. los últimos ańos del colegio nadie se metía con nosotros.